Thursday, May 31, 2007

¡Buena Música, Paladares!



"Volton"


El power trío de Zona Norte se presenta en vivo, el sábado 2 de Junio, en Syra (Av Libertador 2699-Olivos) a las 22.30 hs. Altamente recomendable para aquellos que deseen escuchar una banda ajustada, prolija y con grandes arreglos. En esta oportunidad, tocando temas propios y por supuesto, algún "cover" de The Police (por favor, escuchen la versión de "So Lonely"). A 10 pesos. ¡Una bicoca! Mas información sobre la banda en www.myspace.com/volton3 o volton3@gmail.com

Monday, May 28, 2007

Declaración de Principios
No me toquen el paladar
Vuelve tras larga travesía, esta querida actualización del blog radiofónico. Hoy con una declaración de principios. Sí. Una más y no los molesto más.
Al cabo de un largo rato, me comunicaron que yo, Leandro David Gargiulo, no era único e irrepetible. La conclusión no habia sido consecuencia de un ensañamiento deliberado contra mi persona, sino que el profesor lo hacía extensivo a todos mis compañeros en el aula, a todas las personas que corrían por la calle tratando de evitar la lluvia, a todos los que habían preferido quedarse a leer en su casa algún libro de psicología, a todos nosotros. “Nosotros”...como personas, seres humanos, seres sociales, seres discursivos, conjunto de significaciones. Según la concepción de este buen hombre, nadie es un producto único e irrepetible; todos estamos atravesados por infinitos discursos sociales que nos esculpen, nos moldean, nos condicionan. Las marcas que llevamos inscriptas como fuego sagrado en nuestra filosofía, en nuestra vida, formaron parte de otras vidas anteriores. Pertenecieron a otras concepciones del mundo, del arte, de la historia.
Fue algo que me molestó por el resto de la noche; se instaló entre ceja y ceja hiriendo mi orgullo de Paladar Negro. ¿Todo lo que proclamaba desde este micrófono era vano, vacuo y sin sentido? No podía ser. ¿Se derrumbaban los pilares de mi visión acerca del placer?. Por un momento, temí que las palabras del profesor fueran inexorables.
Hasta que analicé lo ocurrido y lo plantee en voz alta: Es posible que alguien haya invocado a la libertad, la diversidad, la fragmentación como aristas insustituibles de su obra; es factible que haya caído en un sueño ya soñado por otros; es probable que piense, desarrolle, realice mi vida igual que muchos.
Sin embargo, cada minuto que paso escribiendo esta apertura es un instante único en mi vida. Cada paso en el camino es un paso mío, influido quizás por muchos otros pasos, pero realizado por propia voluntad y no por la voluntad de otros. Esto es fisicamente comprobable. El Paladar Negro es personal. Cada persona camina y se desarrolla por la única e irrepetible voluntad de caminar..entonces permítanme la lógica transitiva: el paladar negro es único e irrepetible.

Tuesday, April 10, 2007

Sin prejuicios

¡El amor todo lo Bence, Amelia!

Leer hasta el final y acompañar la lectura con "Come on" de Barry White, embajador de suspiros y hacedor de ambientes amatorios de todo el mundo de la música. ¡Salud, Barry!

Después de un día mezquino en caricias telefónicas, el anochecer los encontró exhaustos. La carrera alocada por terminar balances y cierres contables fue desgastante para ambos. Los tiempos modernos contribuían a que el silencio, infame y porfiado, interrumpiera la charla cotidiana de novedades. No había fuerzas para iniciar conversación alguna y se engullía la comida sin levantar la mirada del plato. Una alarmante automatización de los sentidos se había posado en ese comedor. Uno de los dos, percibió ese angustioso pedazo de tedio asfixiando la voz y se levantó para buscar algo a la cocina. El otro se recostó contra el respaldo de la silla y puso sus manos detrás de la cerviz como para buscar la ubicación justa en la que el sueño lo encontraría presto y seguro. Jamás escuchó cuando los pasos del otro fueron hacia el aparador; quizás tampoco haya percibido el ruido de las copas apoyarse en la mesa del living. Sin embargo pudo oír, una lejana voz que aumentaba en intensidad…..y que ganaba espacio entre ellos hasta ocupar todo el ambiente con una autoridad avasallante. Ninguno se preocupó por el volumen de la música. Poco importó que la mesa haya quedado sin retirar, los trastos sin limpiar y que a la mañana siguiente tuvieran que madrugar para comenzar un nuevo día. Era el momento de acomodar la cabeza en el hombro del otro y dejarse llevar por la cadencia de los cuerpos. Juan tomó una copa y brindó con Santiago, por ellos, por él y por la saludable sensación de nunca dar por sentado un instante juntos.

Tuesday, April 03, 2007

Delicias cotidianas

Sobre

Lo cotidiano trae en su vertiginoso ritual de horas azarosas, varias contradicciones y paradojas. He aquí, una de ellas, propuesta por nuestra prolífica amiga L L. ¡Bruja!



Doblé la hoja en tres rectángulos perfectos y antes de confinarle un destino, la dejé descansar del generoso doblez que había soportado. Tomé el sobre que tenía sobre el escritorio y humedecí con mi lengua sus contornos para cerrarlo de forma correcta, a fin de evitar los reproches de la oficina postal.

Llegué al correo y entregué la carta a la señora que estaba del otro lado de la ventanilla. Yo, sonreía. Ella...casualmente, no. Es más, podría asegurar que no recuerdo haber visto un rostro tan apático en mi vida. Según el procedimiento de despacho, el destinatario recibiría todo lo que escribí, corregí y reescribí dentro de las primeras noventa y seis horas.

Pasaron las horas. Los días. Me arrepentí una y mil veces de lo que había hecho. Mentalmente, leí la carta (podría recitarla hoy sin omitir signo de puntuación) y encontré errores. Frases que él podría malinterpretar.

Justifiqué su silencio, su ausencia. Asumí el error. Una y otra vez me culpé por haber enviado ese sobre.

A 94 horas de haberlo enviado, tuve respuesta a tanta incertidumbre. Sonó el timbre. Me ilusioné. Era el cartero. Baje la escalera nerviosa. Me entregó un sobre. Lo recibí ansiosa, casi desesperada. Rompí uno de los bordes y saqué el papel. Comprobé que era un papel conocido, bastante similar al que uso para enviar cartas. Cartas de las que suelo arrepentirme de haberlas escrito. Cartas que recuerdo y podría recitarlas sin omitir signo de puntuación. Cartas con las que justifico silencios y ausencias. Cartas que envío sin nombre y que vuelven al remitente, justo a la hora exacta en que debería haber sido entregada.

Monday, March 26, 2007

Nunca Más
Paladar Negro se plegó al trigésimo primer aniversario de la persecución y asesinato del periodista Rodolfo Walsh. A continuación el valiente testimonio, la carta abierta dirigida a la Junta Militar, a un año de su irrupción en el poder.
Carta abierta a la Junta Militar

1. La censura de prensa, la persecución a intelectuales, el allanamiento de mi casa en el Tigre, el asesinato de amigos queridos y la pérdida de una hija que murió combatiéndolos, son algunos de los hechos que me obligan a esta forma de expresión clandestina después de haber opinado libremente como escritor y periodista durante casi treinta años.
2. Quince mil desaparecidos, diez mil presos, cuatro mil muertos, decenas de miles de desterrados son la cifra desnuda de ese terror.
3. La negativa de esa Junta a publicar los nombres de los prisioneros es asimismo la cobertura de una sistemática ejecución de rehenes en lugares descampados y horas de la madrugada con el pretexto de fraguados combates e imaginarias tentativas de fuga.
4. Entre mil quinientas y tres mil personas han sido masacradas en secreto después que ustedes prohibieron informar sobre hallazgos de cadáveres que en algunos casos han trascendido, sin embargo, por afectar a otros países, por su magnitud genocida o por el espanto provocado entre sus propias fuerzas.
5. Estos hechos, que sacuden la conciencia del mundo civilizado, no son sin embargo los que mayores sufrimientos han traído al pueblo argentino ni las peores violaciones de los derechos humanos en que ustedes incurren. En la política económica de ese gobierno debe buscarse no sólo la explicación de sus crímenes sino una atrocidad mayor que castiga a millones de seres humanos con la miseria planificada.
Estas son las reflexiones que en el primer aniversario de su infausto gobierno he querido hacer llegar a los miembros de esa Junta, sin esperanza de ser escuchado, con la certeza de ser perseguido, pero fiel al compromiso que asumí hace mucho tiempo de dar testimonio en momentos difíciles".
Buenos Aires, 24 de marzo de 1977. Rodolfo Walsh

Tuesday, March 20, 2007

De puño y letra de John;

De gola y garganta de Pedro


En una grata combinación de caracteres, la apertura de Paladar Negro contó con la presenciade John Lennon y Pedro Aznar, quienes se estrecharon en un cálido abrazo atemporal. Paladar Negro corrió las cortinas del tiempo y descubrió una semblanza contemporánea de la sociedad cosmopolita....lean, escuchen, ¡No se aislen, loco!





La gente dice que todo nos viene servido

¿no ven el miedo que tenemos?

Aislamiento

Tenemos miedo de estar solos

Todos necesitamos un hogar

Aislamiento

Apenas un chico y una chica

tratando de cambiar el ancho mundo

Aislamiento

El mundo es apenas un pueblito

donde todos nos tratan de humillar

Aislamiento

Yo no espero que entiendas

después de todo el dolor que causaste

Pero al mismo tiempo no es tu culpa

sos sólo un humano, una víctima de los insanos

Tenemos miedo de todos, miedo del sol

Aislamiento

El sol jamás desaparecerá

pero al mundo pueden no quedarle muchos años

Aislamiento.

Monday, March 12, 2007






Nuevas Instrucciones





Paladar Negro educa; Paladar Negro entretiene y te dice contento:



"Escuchános la semana que viene"


Pronta entrega (¡por favor!) de esta ristra satánica de consejos para ser feliz y bien negro. Por el momento, adjunto un poema de Edgar Allan Poe bastante conocido, y por cierto, muy negro. Recomiendo escuchar el último programa donde formó parte del repertorio de variedades. La dirección es: www.arinfo.com.ar/paladarnegro.wma




En una noche pavorosa,



inquieto releía un vetusto mamotreto



cuando creí escuchar un extraño ruido,



de repente como si alguien tocase suavemente a mi puerta:



«Visita impertinentees, dije y nada más » .


¡Ah! me acuerdo muy bien;



era en invierno e impaciente medía el tiempo eterno



cansado de buscar en los libros la calma bienhechora



al dolor de mi muerta Leonora



que habita con los ángeles ahora y para siempre jamás!


Sentí el sedeño y crujidor y elástico



rozar de las cortinas, un fantásticoterror,



como jamás sentido había y quise aquel ruido explicando,



mi espíritu oprimido calmar por fin:



«Un viajero perdido es, dije y nada más ».

Y la ventana abrí: revolcando vi entonces un cuervo



venerando como ave de otra edad;



sin mayor ceremonia entró en mis salas



con gesto señorial y negras alas



y sobre un busto, en el dintel, de Palas posóse y nada más.







Miro al pájaro negro, sonriente ante su grave y serio continente



y le comienzo a hablar, no sin un dejo de intención irónica:


«Oh cuervo, oh venerable ave anacrónica,



¿cuál es tu nombre en la región plutónica? »Dijo el cuervo: «Jamás ».


Largo tiempo quedéme así en reposo



aquel extraño pájaro ominoso mirando sin cesar,

ocupaba el diván de terciopelodo juntos nos sentamos



y en mi duelo pensaba que Ella,



nunca en este suelo lo ocuparía más.


«Profeta, dije, augur de otras edades

que arrojaron las negras tempestades aquí para mi mal,



huésped de esta morada de tristura,



dí, fosco engendro de la noche oscura,





si un bálsamo habrá al fin a mi amargura »:dijo el cuervo: «¡Jamás! »



«Profeta, dije, o diablo, infausto cuervo





por Dios, por mí, por mi dolor acerbo,



por tu poder fatal dime si alguna vez a Leonora volveré a ver




en la eternal aurora donde feliz con los querubes mora »;dijo el cuervo: «¡Jamás! »




«Sea tal palabra la postrera



retorna a la plutónica rivera,»grité:




«¡No vuelvas más, no dejes ni una huella, ni una pluma




y mi espíritu envuelto en densa bruma




libra por fin el peso que le abruma! »dijo el cuervo: «¡Jamás! »




Y el cuervo inmóvil, fúnebre y adusto





sigue siempre de Palas sobre el busto y bajo mi fanal,




proyecta mancha lúgubre en la alfombra y




su mirada de demonio asombra...



¡Ay! ¿Mi alma enlutada de su sombrase librará?




¡Jamás!